Tus ojos verdes de fuego,
Ya no son tus ojos,
la emfermedad los nubló.
El plomizo paso del tiempo,
dobló tu porte orgulloso.
Esa cosa inerte no eres tu.
No me susurras ya,versos al oido,
ni me exiges caricias,
con mirada ausente.
A dejado la noche,
de imitar tu forma,
pues no queda en esa estatua fria,
altivez felina,ni silenciosa gracia.
Mas hay sabor dulce en mi llanto,
pues no hay lagrimas vertidas,
como las que derramas,por aquellos que nos hicieron felices.
Estuve en tu llegada,a este mundo feo,
y languidecí contigo,cuando lo abandonaste,
dejandolo mas feo aun,
privado ya de tu elegancia.
Ronrronea ahora satisfecha,
en el calido regazo de Bast,
pues para siempre seran los dias calidos,
y el suelo mullido como ovillo de lana.
Ahora eres mas si cabe,
"ultraterrena como los ideales,
y melancolia como el amor,mas alla de la distancia".
22-1-09 John.
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